jueves, 31 de marzo de 2016

El momento Vandoorne

La baja de Fernando Alonso en Barhein tras su accidente en Australia, abre las puertas a un Stoffel Vandoorne que apunta muy alto. (FOTO: www.diariomotor.com)

Ya es oficial. Fernando Alonso no estará en el Gran Premio de Barhein y las noticias en torno al asturiano no son todo lo buenas que creíamos, aunque si aliviadoras para lo que podía haber sido.
El examen médico reveló un neumotórax y varias costillas rotas tras un accidente que ya podemos calificar como el más fortuito de su carrera después de Brasil 2003 y el misterio de Montmeló en la pretemporada del año pasado. “Hice todo lo posible para estar en Barhein” declara. Y él mismo lo admite, “Lo primero es la seguridad y después el rendimiento”.

Si ya de por si toda precaución es poca por parte de los médicos de la FIA y efectivamente, la decisión de no dejarle correr es la correcta, también es algo preocupante que se hable de ser seria duda para el Gran Premio de China dentro de quince días. Unos tests entre medias evaluarán al asturiano y determinarán si su ausencia es una o dos carreras.

La solución interina, como no podía ser de otra manera, estaba en la casa y tiene el nombre de Stoffel Vandoorne y Parafraseando de nuevo las declaraciones de Alonso al afirmar “Primero es la seguridad y después el rendimiento”, Vandoorne seguro que ofrece lo segundo con muchas garantías a tenor del rendimiento que se le ha visto en fórmulas de base. Así que se terminó el medirse con Matsushita como compañero, ahora se las verá con un hueso como es el veterano Jenson Button.


El belga es un piloto al que hay serias ganas de ver en acción después de un triunfo autoritario en GP2 y ser uno de los grandes baluartes de Woking. Él consiguió comerle el terreno a Kevin Magnussen dentro de Mclaren, él tiene un palmarés que le hacen merecedor de esta oportunidad a la par que nos extraña que le toque buscarse la vida en la Super Fórmula  sin un volante esta temporada. Fórmula 4 Europea, Fórmula Renault 2.0, GP2 y un subcampeonato en las World Series deben ser suficiente aval para observar que a partir del viernes se subirá al Mclaren uno de los jóvenes más prometedores, y quién sabe si será el inicio de algo importante como lo fue para Vettel aquella sustitución de Robert Kubica en BMW en 2007. 

miércoles, 30 de marzo de 2016

La agonizante Fórmula 3.5

La salida de un histórico como Pons Racing evidencia las turbulencias que se están produciendo en la Fórmula 3.5 V8 (FOTO: ws.ponsracing.com)

Las antiguas World Series viven sus horas más bajas desde que en 1998 empezara este campeonato, afincado mayormente en España al iniciarse y al cual la eclosión de Marc Gené y Fernando Alonso le catapultó hasta convertirse en una categoría referencia como antesala de la Fórmula 1. Ahí quedan los nombres de los dos citados más Heikki Kovalainen, Robert Kubica, Ricardo Zonta, etc que vieron un futuro claro gracias a esta competición.

Apadrinadas por Renault, dieron un salto cualitativo internacionalizándose en su calendario y no hay que echar la vista muy atrás para ver a Carlos Sainz Jr campear. Quién nos iba a decir que dos años después, un certamen que merece todo el respeto y admiración, así como las loas a Jaime Alguersuari padre por su creación, quedaría herido de muerte.

Acabado 2015, Renault decidía bajarse del barco y centrarse completamente en el Gran Circo y su nuevo proyecto a largo plazo. Se preveía que el reinicio y cambio de nombre de la categoría a Fórmula 3.5 V8 sería complicado en su primera temporada, pero nada invitaba al pesimismo. Algunos equipos con solera decidían continuar y pilotos como Tom Dillmann o Mathieu Vaxiviere otorgarían más colorido en la lucha por el título final.

Ahora, a quince días de que una nueva era de comienzo, la situación no es nada halagüeña. Pons Racing abandona repentinamente dejando a Bosak y Visser sin equipo después de adquirir un compromiso con la escuadra española. Y otro histórico como Tech 1 Racing también hace las maletas aunque en su caso no había pilotos comprometidos.

El caso es que con el telón a punto de alzarse, las cosas no pueden marchar peor. Únicamente son 12 pilotos los confirmados y a muchos de ellos toca fiarles en sus equipos sin que el dinero de los patrocinadores haya llegado. Y los tests de pretemporada no llegan a la veintena de contendientes.

Con este panorama, sólo queda encomendarse a la inventiva de Jaime Alguersuari para salvar un campeonato que no merece lo que le está ocurriendo. ¿Soluciones?, difícil plantearlas. Porque siempre ha sido un certamen emocionante, justo en sus dos mangas y para nada excesivamente caro. 

sábado, 26 de marzo de 2016

Pilotos y aficionados quieren cambios

La GPDA ha redactado una carta en la que exigen modificaciones de manera inmediata a la Fórmula 1 (FOTO: www.telegraph.co.uk / Getty images)

La reciente misiva de los pilotos, firmada por Alex Wurz, Jenson Button y Sebastian Vettel en representación de la parrilla ahonda más en la crisis que vive el Gran Circo. Ven una Fórmula 1 obsoleta, en la que urgen los cambios y sobre todo la forma de gobernar la misma.

Se puede pensar que el nuevo sistema de calificación ha sido la gota que ha colmado el vaso. Nadie lo ha comprendido ni a nadie le ha gustado,  simplemente decidieron sobre la bocina cambiar un formato que funcionaba y era atractivo. Ahora, esta novedad podría tener su última oportunidad en Barhein. Si falla, sabemos a lo que se volverá.

Fernando Alonso también se muestra de acuerdo cuando afirma que “otras competiciones nos están adelantando por la derecha”. Razón no le falta como si falta autocrítica a esos mandos de la Fórmula 1, cuya forma de gobernar parece autoritaria actualmente, plantando el Gran Premio de Europa en “casual” cita con Le Mans a sabiendas de que el campeonato de resistencia crece año tras año, y que los pilotos de Fórmula 1 lo miran para correrlo a la vez que mantienen sus contratos con sus actuales escuderías.  En resumen, la victoria de Hulkenberg el año pasado, los coqueteos de Alonso con Porsche y demás negociaciones escuecen.

Somos muchos los que no queremos una Fórmula 1 artificial en sus adelantamientos con el DRS, ni hipotéticos aspersores que llenen la pista de agua, ni V6 insulsos, ni pilotos a ritmo de tortuga para no fundirse el combustible, ni quiméricos sistemas de medallas, ni chispas forzadas en los bajos, ni sustitución de circuitos míticos para contentar a jeques multimillonarios para que el trazado se quede vacío, ni dobles puntuaciones para alegrar a los anteriormente mencionados.


La Fórmula 1 ha de verse actualmente como un producto empresarial, mantenido por su afición que paga por verla debiéndose a ella. Y sí, paga cada vez que va a un Gran Premio o test y paga cuando contrata los paquetes televisivos para poder sentarse frente al sillón a disfrutar de ella. Porque cierto es que en España por primera vez es de pago, pero en otros países lleva mucho tiempo con ese modelo.  Así que más escuchar al aficionado y ponerse manos a la obra para ver cambios reales. Que de momento el único acierto ha sido ver más variedad de estrategias pudiendo llevar los equipos hasta tres compuestos de seco por cada Gran Premio. 

domingo, 20 de marzo de 2016

La opción Ferrari

Las salidas y el ritmo de Ferrari los domingos pueden ser los grandes animadores del campeonato (FOTO:www.lapatilla.com)


Puede parecer que todo ha empezado para que nada cambie y que la única variación es un nuevo sistema de calificación que no parece convencer a la mayoría. Pero al menos, este año podemos tener el hándicap de las salidas de Ferrari, el arma mejor guardada en Maranello que hoy ha salido a relucir dejando a Mercedes dominar el sábado para intentar dar el hachazo el domingo. Y vaya que si lo hicieron sorprendiendo a las balas plateadas en la arrancada con un sistema digno de estudio, manteniendo un ritmo de escaparse de sus perseguidores y siendo conscientes desde el muro que los puntos se juegan en la jornada dominical.

Vettel es el mariscal de Ferrari, el líder indiscutible que ve a años luz suyo a Kimi Raikkonen, el candidato a acabar con el reinado de Hamilton y sólo una cosa le ha apartado de la victoria. La bandera roja por el fuerte accidente entre Esteban Gutiérrez y Fernando Alonso viéndose beneficiado principalmente Nico Rosberg. Y aún así, Vettel puso contra las cuerdas a Hamilton en las últimas vueltas.

Un poco más atrás, la vida sigue más o menos igual y cada cual está donde se esperaba. Williams tiene algunos problemas que les urge subsanar, Toro Rosso se sube a las barbas de sus hermanos mayores a la vez que afloran los egos entre sus dos jóvenes talentos y Haas, a pesar de que su sitio va a ser pelear no ser el farolillo rojo con Manor, ha sumado hoy unos brillantes y sorprendentes puntos sabiendo Grosjean leer perfectamente la carrera sumándose a la tendencia de ese neumático medio que apenas había sido probado en los libres.


La zona media baja la componen los equipos esperados. Renault tendrá que luchar por puntuar, Force India está en el sitio de todos los años a pesar de los problemas legales a los que se enfrenta su dueño y Mclaren lo único que vemos es mejora notable en fiabilidad. Porque era impensable bajar esa abismal diferencia que les separaba de la cabeza y así ha sido. No se ha reducido y su sitio habitual está en la Q2.