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Parecía
que estaban contentos con él en Manor, elogiaban su trabajo no sabemos si de
manera sincera o de cara a la galería. Lo cierto es que el castellonense
sucumbe al dicho de “Poderoso caballero es Don Dinero”, dado que era muy
complicado mantenerse en una escudería únicamente mostrando talento sin aportes
económicos. Y eso que había soportado gran parte de zozobra como fue la llegada
de Fabio Leimer en calidad de piloto reserva del equipo y que daban al suizo
grandes opciones de ocupar el asiento del piloto español.
En
muchas ocasiones, el acto no es lo censurable, sino las formas. Y eso es lo que
hay que reprocharle a ese equipo que hace menos de un año estaba más muerto que
vivo. Porque Roberto Merhi, hace apenas unos días, anunciaba de manera oficial
que dejaba las World Series para centrarse en la Fórmula 1, no se sentía capaz
de continuar compaginando dos categorías que no le dejarían tiempo de respiro
en lo que resta de año amén de que este año, más con la cabeza en la Fórmula 1,
se despedía de sus opciones de título prácticamente desde Motorland Aragón.
Recordemos
que Merhi, para poder debutar en un Fórmula 1 ha tragado mucho. Él asumía que
las carreras dentro de ese monoplaza serían aburridas, sin poder pelear con los
demás pilotos, pero es que en muchas ocasiones, ni siquiera ha podido bregar
frente a Will Stevens, al cual comprensiblemente le otorgaban las mejores
prestaciones por ser el que económicamente cooperaba con la escudería en forma
de patrocinios. Sino que además, el que fuera campeón europeo de Fórmula 3, ha
tenido que tragarse su orgullo ante algún desprecio y salida de tono hacia él
por parte del piloto británico, refiriéndonos a su famoso twitter en Barhein
jactándose de meter 44 segundos a Merhi sin contar los problemas que el español
sufrió toda la carrera y su citada superioridad mecánica. Ahí Roberto, demostró
más caballerosidad “británica” al no entrar al trapo y no publicar nada
polémico cuando en los circuitos técnicos donde se ven las manos, le daba baño
tras baño confirmando su superioridad ante su compañero en Silverstone, sobre
todo cuando la lluvia hizo acto de presencia, porque ahí, hasta tres segundos
por vuelta le podía meter.
Merhi
se despide parcialmente de Manor a sabiendas de que aún correrá en Sochi y Abu
Dhabi, únicas carreras en la que no podrá estar su sustituto, Alexander Rossi,
por la coincidencia con las citas de GP2 y las ansias del americano de apurar
sus últimas oportunidades de dar caza a Stoffel Vandoorne.
El sentir
de la estancia de Merhi en Manor puede ser el de alegría por debutar en la
máxima categoría a la vez que se mezcla por dentro el de frustración por no
dejarle competir en igualdad, por no permitirle explotar todo su talento y
sobre todo, lastrarle para ofertas que pudieran ser jugosas.
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