Es
incuestionable que estamos ante la última temporada en abierto de la Fórmula 1
en España. 2016, para el pesar de muchos, pasará a ser de pago. Algunos
contratarán el paquete y otros no lo harán, bien por no disponer de medios económicos
o por no considerarlo oportuno o justo.
El
tiempo ha transcurrido, y por tanto, es de recibo comparar la calidad de ambas
emisiones para de verdad evaluar, aunque la diferencia radique, como no, en que
en Movistar TV la carrera sea íntegra, sin cortes publicitarios.
Movistar
TV repite una y otra vez cada prueba, cada postcarrera, cada interesante
resumen del Gran Premio desde las radios de los equipos. Sin duda, una apuesta
fuerte que ha de refrendarse con la emisión en directo, que es donde al fin y
al cabo hay que fidelizar a la audiencia. ¿Gana ahí Movistar Tv? Vayamos por
partes:
Con una señal única para todas las cadenas que televisan la Fórmula 1, las
locuciones son la gran base para llevar a cabo esa captación de afición,
justificar la inversión que haga el seguidor en esa cadena, emisora o lo que
sea. Y ahí, lamentablemente he de decir que Antena 3 lleva la delantera. Por
mucho que pueda criticarse abiertamente que el forofismo hacia Fernando Alonso
se base en juicios de valor hacia los demás pilotos llegando a límites en donde
nunca debería llegarse. Pero a favor de estas retransmisiones tenemos la
sabiduría de Pedro de la Rosa como gran apoyo y sus aportes técnicos, amén del
riguroso seguimiento de las paradas en boxes, enterarnos al momento de los
ritmos de cada piloto, las diferencias entre ellos y cuántas vueltas lleva cada
uno con determinados neumáticos, permitiendo al espectador evaluar el desgaste
de las gomas y juzgar más pormenorizadamente si un piloto o equipo se equivoca
o no a la hora de elaborar o ejecutar sus planes, sin necesidad de enchufar
otra pantalla con la aplicación oficial de la Fórmula 1.
En
cambio, si Movistar TV gana por goleada a Telecinco en motociclismo, a la hora
de la Fórmula 1 no podemos decir lo mismo. Josep Lluis Merlos se encarga de las
retransmisiones con dotes de Speaker que nada tienen que envidiar a las de
Antonio Lobato. La credibilidad del catalán siempre ha sido alta entre los
seguidores del motor aunque alguna vez se haya tirado alguna exclusiva al más
puro estilo “Francois Gallardo”. Pero llegado el momento de narrar la carrera,
todo es mucho más superficial y sin entrar en detalles. Cuentan en sus filas
con un gran conocedor de este mundo como Joan Villadelprat, sin duda una voz
muy autorizada dentro del mundo de la alta competición pero que no acaba de
conectar con el espectador en el momento de transmitir sus conocimientos como
si logra hacer Pedro de la Rosa. Y en cuanto a los pilotos-comentaristas,
pues la experiencia de Andy Soucek en
Fórmula 1 es más bien corta. Se limita a un año de probador con Virgin y dos
tests con Toyota y Williams. Lo que le hace mucho más conocedor de cualquier
categoría de base que de todo lo que rodea al Paddock del Gran Circo.
Por
último, la diferencia en las audiencias habla por sí sola. El Gran Premio de
Italia sobrepasó los dos millones de espectadores en Antena 3 mientras que ante
las pantallas de Movistar sólo se encendieron 47.000 televisores. Así que no vale la excusa de la bajada de
audiencias ante la crisis existencial de la Fórmula 1 o que Alonso ahora no
pisa puestos delanteros. El problema puede residir en el planteamiento, en que
la gente que no puede o no estima justo pagar por ver la carrera pierde el
interés y sobre todo, en que no baste con contratara Movistar TV, sino que
además, ese paquete hay que comprarlo aparte. Algo que obviamente, no es
recibido con agrado en el público español y será hora de pensar en incluir los
contenidos de motor cuando se contrate la plataforma, sin pagos extras ni demás.